Read with BonusRead with Bonus

164

El Rey había enviado su jet privado para llevarme a Francia. Fue un vuelo de casi once horas y me senté preguntándome qué podría querer el Rey de mí. Junto con la invitación había un itinerario detallado de qué vestir, cuándo estar en el aeropuerto y cuándo llegaría al castillo del Rey.

Cuando bajé...