Read with BonusRead with Bonus

205

Vanessa

No podía creerlo. Todavía me costaba creer que mi propia hija pudiera guardar tantos secretos de mí. Pensé que éramos cercanas. Pensé que éramos como uña y carne. Pensé que no teníamos secretos entre nosotras. Pensé que... Oh no, dejé de pensar porque ya no sabía qué más pensar.

Tenía que ...