Read with BonusRead with Bonus

Salva a Alina

DANTE

Corrí hacia Alina, acudiendo en su ayuda antes de que pudiera caer al suelo. El miedo me consumió por primera vez y no tenía idea de por qué.

—¡Diego! —grité, sacando inmediatamente mi pistola de los pantalones y disparando dos tiros rápidos a su brazo.

Diego, que intentaba huir, cayó al su...