Read with BonusRead with Bonus

Capítulo trescientos cuarenta y siete

ADELLE

Girando el letrero de abierto a cerrado, bajo las persianas. Una vez que todo está guardado y el sistema de seguridad está activado, escapo por mi cuarto trasero, frotando la cicatriz en mi palma como es mi costumbre.

Hoy estuve cerca. Una señora entró hablando como si supiera y mostran...