Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 332 Juntos

Nina

El aire entre nosotros era sofocante. Los ojos de Enzo, que usualmente eran de un cálido marrón que me recordaba a una acogedora chimenea crepitante, ahora tenían un tono tormentoso e incierto.

Estaba herido; eso era más que evidente.

—Me estás preguntando si habría abortado sin decírtelo —f...