Read with BonusRead with Bonus

5

Valenzano POV:

—¿Por qué te estás quitando los zapatos? —le pregunté, confundido.

—Mis pies me están matando —sonaba tan adorable que literalmente me la comería.

—No es una mala idea —escuché decir a Vintage.

Sin pensarlo, la levanté en brazos y la llevé a la cocina. En el momento en que estuvo en mis brazos, todo lo que podía pensar era en lo sexy que se vería debajo de mí mientras la hacía llegar al clímax varias veces. Me senté y, sin darme cuenta, la coloqué en mi regazo y comencé a alimentarla. Sorprendentemente, me permitió hacerlo. Olvidé que no estábamos solos hasta que escuché a West y Jazz aclararse la garganta.

Comimos, hablamos y bebimos, sí, bebimos mucho, chupitos, chupitos y más chupitos. Nunca hubiera pensado que Cleo y Jazz pudieran beber de esa manera. Lamentablemente, todo lo bueno debe llegar a su fin y Cleo y Jazz empezaron a bostezar.

—Damas, les mostraré sus habitaciones —dije mirando a Cleo.

—No es necesario mostrarle a Jazz, ella dormirá conmigo... quiero decir, en mi habitación —dijo West mientras él y Jazz reían.

—Bueno, Cleo, te mostraré tu habitación —se ve tan bien con ese vestido que solo puedo imaginar lo bien que se verá sin él.

Tan pronto como llegamos a su habitación, estaba luchando contra el impulso de arrancarle el vestido y follarla contra la pared.

—Mierda, yo lo habría hecho —escuché decir a Vintage sarcásticamente. No entiendo por qué me resulta tan difícil bloquearlo cuando estoy cerca de ella.

—Hay artículos de tocador en el baño y si necesitas algo más, por favor házmelo saber —esperaba que dijera sí y que ese sí significara que quería algo de sexo. Pero no, necesitaba algo para dormir.

—Deberías haberle dicho que durmiera desnuda —joder, ¿en serio por qué está hablando cuando estoy tratando de concentrarme para no besar a esta mujer?

Voy a mi habitación y Vintage y yo tenemos una larga conversación sobre la situación. Finalmente acordamos que yo lideraré y él seguirá. Tomo una camiseta de mi cómoda y camino hacia su habitación y toco la puerta, no hay respuesta. Toco de nuevo, aún sin respuesta.

Entré en la habitación y veo que la luz del baño está encendida, pero no escucho agua corriendo. Toco la puerta del baño, no hay respuesta. Entro lentamente y la veo dormida en la bañera, mi polla se pone tan dura que duele.

—OH, DIOSA, SE VE SEXY COMO EL INFIERNO —escucho a Vintage gritar en mi cabeza.

—Vintage, ya pareces un calzonazos, córtalo.

—No, Valenzano, no parezco un calzonazos... parezco alguien que quiere azotar un poco de coño.

Cubro mi erección con una toalla y la camiseta que traje para ella. Me aclaro la garganta esperando que no esté en un sueño profundo y se despierte con el sonido.

Cleo POV:

Sígueme, eso es todo lo que escuché, y tomé su mano y me llevó a una habitación.

—Mi habitación está al otro lado del pasillo —dijo señalando en la dirección de su cuarto. Abrió la puerta de mi habitación y entré.

—Hay artículos de tocador en el baño y si necesitas algo más, por favor házmelo saber —dijo inclinándose hacia mí, su rostro a centímetros del mío. ¿Por qué demonios Jazz me dejó sola con este sexy Alfa?

Comenzó a alejarse y entonces me di cuenta de que había algo más que necesitaba, algo para dormir. Tal vez estoy pidiendo demasiado, pero nunca lo sabré si no lo pido.

—Hay algo que necesito —dije muy dudosa.

—¿Y qué es eso? —me miró como si yo fuera su presa.

—Al...al...algo para dormir —joder, ahora estoy tartamudeando. Lo vi sonreír, se ve tan condenadamente bien.

—Te traeré algo para dormir —dijo y se dirigió a su habitación.

Mi corazón latía rápido. Después de calmarme, miré alrededor de la habitación. Y es increíble. En el centro del piso hay una enorme cama redonda con sábanas de satén dorado. Las paredes son blancas con molduras doradas, hay un tocador con un espejo de cuerpo entero. Entré al baño y hay una bañera de hidromasaje que parece poder llenar a 10 personas. Encontré el aceite de baño y empecé a llenar la bañera.

Una vez que estuvo lista, me metí y me quedé dormida. No sé cuánto tiempo estuve fuera, pero me despertó alguien aclarando su garganta. Pensé que era Jazz viniendo a ver cómo estaba, pero no, era Valenzano, de pie, sin camisa, sosteniendo una toalla y algo más.

Al abrir los ojos, vi a Valenzano de pie, sin camisa, sosteniendo una toalla y algo más. Con esta luz puedo verlo mejor, parece esculpido por Miguel Ángel. Tenía razón cuando dije que era puro músculo, sus abdominales, los músculos de sus muslos, cada parte de él es músculo duro. Y el músculo más importante que está tratando de esconder detrás de esa toalla está a la vista. Mientras me mira, sus ojos cambian de verde avellana a dorado, igual que en el club.

—Hola —dije tratando de no hacer que el momento pareciera incómodo.

—Toqué la puerta y no respondiste... Te traje una toalla y una camiseta para dormir —dijo tratando de mirar a todas partes menos a mí.

—Gracias —dije tímidamente.

—No hay problema —dijo sonriendo. Maldita sea, esa sonrisa me va a atrapar si me quedo aquí más de una noche.

Dejó los artículos en el lavabo y salió. Sentí la urgencia de correr tras él y sentarme en su cara. Me di una palmada en la frente. ¿Qué demonios me pasa? Estoy tan caliente y molesta por él. ¿Ha pasado tanto tiempo desde que un hombre me tocó?

Si mi coño pudiera hablar, gritaría: "¡CLARO QUE SÍ!". Necesito más información sobre él, no puedo saltar a la cama de alguien sin saber cuál es su estado civil. Salí de la bañera, me sequé y me vestí, y me dirigí a la cama. Sentí que todo mi cuerpo se hundía en el colchón.

Previous ChapterNext Chapter