Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 23

Y mis palabras murieron en mi boca.

Mis ojos se apartaron del rostro de la tía Charlotte y se dirigieron hacia él sin que me diera cuenta. Sus ojos ámbar seguían mirándome con la misma frialdad. Sus ojos, que siempre habían sido cálidos, se habían vuelto fríos para mí desde el día en que se anunció...