Read with BonusRead with Bonus

El primer día.

A la mañana siguiente, cuando Seth se despertó, lo primero que notó fue la sensación de libertad ilimitada. Abrió los ojos perezosamente, dirigiendo su atención instantáneamente hacia sus muñecas.

Afortunadamente, sus muñecas ya no estaban atadas al cabecero de la cama. Se frotó los ojos, intentand...