Read with BonusRead with Bonus

#Chapter 200 — Tortitas

Unas horas más tarde, envueltos en nuestras batas más acogedoras, Víctor y yo salimos de nuestra habitación.

Tan pronto como salimos, puedo escuchar el ruido de nuestros hijos abajo, riendo y hablando mientras desayunan.

Agarro mi bata con fuerza alrededor de mi cuello al escucharlos y miro a Víctor...