Read with BonusRead with Bonus

245

Lucy

—Una cosita peleona. Puedo ver por qué mis hijos se divirtieron tanto contigo.

Mi estómago se revolvió mientras luchaba y empujaba. Él se rió.

—No te preocupes. Si te relajas, lo disfrutarás.

Me retorcí, tratando de patear hacia atrás mientras él me torcía el brazo más alto contra mi espalda.

...