Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 385 No pienses en llevártela

El rostro originalmente pálido de Victoria se congeló, sus grandes ojos mirándolo fijamente.

—No crees nada de lo que digo. Olvídalo —Alexander la soltó y luego se paró junto a ella, apoyándose contra la pared como un niño grande perdido.

Victoria lo miró atónita.

¿Qué pasó?

De repente, así.

La...