Read with BonusRead with Bonus

104. Quédate conmigo esta noche

Abraham aparca frente a mi edificio, y un largo silencio se instala entre nosotros. Desde que me subió a su coche y condujo por las bulliciosas calles de Nueva York, no he podido decir una sola palabra. Y Abraham tampoco. A veces sentía su mirada quemándome la piel, pero aún así, no me preguntó nada...