Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 847

Estoy parada frente al espejo, mirándome a mí misma, con los nervios carcomiéndome y jugueteando con mi vestido de manera un poco obsesiva. Es largo, ajustado, marfil y muy elegante. Un modelo ceñido de cola de sirena que se ve genial en mi cuerpo, con mi rostro neutral y atenuado y joyas mínimas. C...