Derretiendo el hielo con el toque de un multimillonario

CAPÍTULO 648

—No te pongas nerviosa. Pronto veremos qué pasa —mi mamá me da una palmadita en la mano mientras nos guía hacia su clínica y enciende todas las luces rápidamente. Iluminando el edificio vacío con un parpadeo de luces fluorescentes que lastiman mis ojos. No puedo hablar, estoy tan entumecida por el s...