Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 57

—Estoy en casa— llamo al apartamento, dejando mis llaves en la mesa del recibidor. Hay música jazz suave que viene del cuarto de Sarah, el olor distintivo del aftershave de Marcus en la sala de estar, y una botella de vino medio vacía y dos copas en la mesa. Suspiro, irritada por dentro, y considero...