Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 478

—¡Por el amor de Dios, deja de obsesionarte, Arry!

—Come, Sophie, por el amor de Dios, o te daré de comer con cuchara—. Arrick mira su reloj y empuja mi tazón hacia mí con agitación después de que lo había alejado de nuevo; se levanta ahora que ha terminado y me lanza esa mirada Carrero. Está trata...