Read with BonusRead with Bonus

Capítulo ochenta y uno

Stella, Natalie, Nora y yo nos vestimos para impresionar.

—¿Chicas, recuerdan el año pasado cuando no teníamos idea de qué ponernos? —se rió Natalie.

—Por favor, éramos un desastre —dijo Stella.

—Oye, al menos teníamos las suites de dormitorio más geniales —dijo Nora. Ella había comenzado a relaj...