Read with BonusRead with Bonus

Capítulo sesenta y ocho

Raleigh

Miro a Lincoln, mi pulso retumbando tan fuerte en mis oídos que no escucho la puerta cerrarse detrás de mis hermanos cuando se van, pero cuando él vuelve su atención hacia mí, no hay manera de que pueda ocultar mi sorpresa.

—¿Qué? —pregunta con una ligera risa, la esquina de su boca levantá...