Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 434

—¡Shirley, despierta! ¡Respóndeme!

Las manos de Lillian temblaban incontrolablemente. No se atrevía a tocar a Shirley. Había tanta sangre acumulándose bajo su cabeza.

—¡Ayuda! ¡Alguien, ayude! —gritó Lillian.

Su visión se nubló, todo parecía un borrón fantasmal. Solo el rojo bajo Shirley destacab...