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Capítulo 467

Como había esperado, el dormitorio estaba vacío, sin rastro de Quinn.

La Sra. Miller y la Sra. Moore lo seguían con aprensión, la imponente figura del hombre que las guiaba proyectando una sombra de miedo en sus corazones. Alexander se giró, su mirada helada perforando a las dos mujeres.

—¿Dónde s...