La Novia que No Puede Hablar

Capítulo 3

Aparece su exnovia

Alexander dijo:

—Freya, el regalo está aquí. Nos vamos.

Freya se puso un poco ansiosa.

—¿Ya? ¿Por qué la prisa? Al menos come con nosotros.

—No. Tengo trabajo que hacer. —Alexander tomó a Quinn y salió de la Residencia Kennedy sin dudarlo.

Freya estaba aún más furiosa, pensando: 'Alexander siempre estuvo del lado de Quinn en el pasado. Luego, estuvo con Getty. Aunque el abuelo lo obligó a casarse con Quinn, nunca le hizo la vida difícil. ¡Incluso se mudó por ella!

'¿La ama? No lo creo. Después de todo, no dijo nada cuando ella abortó. Sin mencionar que todavía está involucrado con Getty.

'Pero decir que no siente nada por ella tampoco parece cierto. Todavía la protege y no se divorcia de ella de ninguna manera.'

Después de volver al coche, Alexander encendió un cigarrillo. Aparentemente, estaba un poco irritado.

Quinn se sentó en silencio, esperando a que terminara de fumar.

Después de terminar su cigarrillo, se volvió para mirarla.

Ella seguía dócil, con una sonrisa en los labios, como si fuera su sirvienta esperando sus órdenes.

De alguna manera, él estaba aún más molesto, y no tenía idea de por qué. ¿No había cambiado en absoluto, verdad?

Él preguntó:

—¿Qué piensas de lo que dijo Freya?

Quinn hizo señas:

—¿Qué?

Él respondió:

—Sobre tener un bebé.

La sonrisa en sus labios se congeló. Ella hizo señas:

—Kaitlyn tiene razón. No deberíamos tener uno.

Ella sabía una cosa desde temprana edad. Cuanto más hermosa era la fantasía, más dolorosa era cuando se rompía.

Cuando era pequeña, Ulysses le compró un pastel de cumpleaños. Justo cuando estaba a punto de pedir un deseo felizmente, Freya le presionó la cabeza contra el pastel.

En el siguiente segundo, estaba rodeada de risas burlonas. Se dio cuenta de que para ellos, el pastel no era para comer, al igual que Alexander no quería realmente tener un bebé con ella.

Alexander preguntó:

—¿Usaste anticonceptivos anoche?

Ella hizo señas:

—Tomé una pastilla.

Sus dedos eran largos y delgados, y cuando hacía señas, parecía que estaban bailando bajo la luz del sol.

Alexander se quedó momentáneamente perdido en sus pensamientos al ver eso. Después de unos segundos, apartó la mirada y arrancó el coche.

—Bien.

Quinn pensó: 'Al igual que Kaitlyn, él está preocupado de que el bebé pueda ser mudo.

'Me alegra ser buena actuando. Cuanto más lo amo, más tranquila parezco.

'Si Alexander me hubiera maltratado y humillado como los demás, tal vez solo habría sentido dolor físico. Mis sentimientos habrían quedado intactos.'

Alexander la dejó en la cafetería donde trabajaba. Tan pronto como detuvo el coche en la puerta, vieron a Getty parada allí. Ella siempre tenía una manera de encontrar a Alexander.

Getty era muy hermosa, con una curva sexy. Su cabello rizado caía casualmente sobre su espalda, y dondequiera que iba, siempre era el centro de atención.

Al ver a Alexander y Quinn salir del coche, se enfureció de inmediato. Incluso sus ojos ardían de ira.

—¿Por qué estás aquí? —Alexander no mostró sorpresa ni culpa al verla.

Claramente, no era la primera vez que sucedía algo así.