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No más

Damiano

—No. Quédate aquí. —Detuve a Jacinta cuando intentó ir tras Althaia. Me dirigí en la dirección en la que ella había corrido, caminando tan rápido como pude. Salí al jardín y la vi apoyada contra un árbol, tratando de recuperar el aliento.

—Althaia.

—¡Detente! Solo... por favor, detent...