Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 2.66

—¡Siena, es hora de ver a ese abuelo tuyo gruñón, viejo, molesto y grosero! —me quejé mientras caminaba por la finca Lamberti—. ¿Y cuándo te volviste tan pesada?

—¡Déjame ayudarte! —una voz detrás de mí llamó mi atención. Me giré sorprendida y vi a Gio, quien tomó el asiento de mis manos—. Se parec...