Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 22

—Despierta, dormilona —canturreó Sabrina. Emma gimió al abrir los ojos y ser asaltada por la luz del sol. Un dolor palpitaba detrás de sus ojos, y cada movimiento traía una nueva oleada de náuseas.

—Ugh, siento como si me hubiera atropellado un autobús —comentó Emma.

—Y te ves como si así fuera —bro...