Introduction
Lo que comienza como un reencuentro lleno de reproches y orgullo herido pronto desentierra viejas emociones, aquellas que ni el tiempo ni la distancia lograron sepultar. Pero el amor, por sí solo, no siempre es suficiente. Secretos no revelados, lealtades divididas y miedos del pasado se interponen entre ellos, poniendo a prueba no solo sus corazones, sino también su capacidad de perdonar y arriesgarse de nuevo.
¿Serán capaces de derribar las barreras que los separan y escribir un nuevo capítulo, o descubrirán que hay amores destinados a quedar en el recuerdo? Cuando el destino les ofrece una segunda oportunidad, Helena y Maximilien deberán decidir si están dispuestos a luchar por la felicidad que una vez les fue arrebatada.
Share the book to
About Author

obraskeyrapayan
Chapter 1
Helena conducía hacia su casa después de un día agotador en el trabajo, ansiosa por un respiro.
Sin embargo, al pasar por el parque cercano a su edificio, algo la hizo frenar en seco.
Allí, vio a su hermana menor entregada a un beso apasionado con un hombre que parecía mucho mayor. Se acercó, confirmando lo que ya temía: su hermana estaba con Billy Baker, el hermano menor de su exesposo, un hombre casado y con la fama de ser un mujeriego.
Helena lo conocía bien; durante su matrimonio con Maximilien, él tuvo que intervenir en varias ocasiones para sacar a Billy de problemas. La rabia la invadió, así que paró el coche y bajó rápidamente para enfrentarlos. Tenía que proteger a Ana de ese hombre que solo le traería sufrimiento.
Le indignaba la falta de vergüenza de su hermana, que sabía perfectamente que Billy estaba casado, pero lo que más le molestaba era la actitud de su excuñado, quien no solo ignoraba la edad de Ana, sino también el lazo que alguna vez unió a sus familias.
—¿Pero qué demonios significa esto? ¿Acaso han perdido la cabeza? —espetó Helena, con la mirada encendida de furia.
—¿Qué pasa, cariño? ¿Será que estás celosa? —respondió Billy, con una sonrisa cargada de cinismo.
—No digas estupideces, Billy. Sabes perfectamente que Ana es menor de edad. Te aprovechaste de su inexperiencia para manipularla. Y tú, ¿no te da vergüenza? Sabías que este hombre es casado y no te importó. ¿Qué clase de personas son ustedes?
—Deja de entrometerte en la vida ajena —replicó Ana, cruzándose de brazos—. Estoy con Billy porque lo amo, y muy pronto se divorciará de esa bruja de su esposa. Nos casaremos y nada podrá evitarlo.
—¿En serio? No te hagas ilusiones. Eso jamás va a pasar. Valeria lo tiene bien amarrado, y si él intenta dejarla, sus infidelidades saldrían a la luz, arrastrando el apellido Baker por el barro. Y créeme, eso es lo último que le conviene.
Ana soltó una risa sarcástica.
—Hablas así porque te carcome la rabia. Yo sí tengo a un Baker a mi lado, y tú ya no. Maximilien jamás volverá contigo. Ahora está comprometido con una mujer de la alta sociedad, alguien que sí está a su nivel. Tú ya no significas nada para él.
Al escuchar aquellas palabras, Helena sintió cómo la rabia le subía por la garganta hasta estallar. Sin pensarlo dos veces, abofeteó a Ana con furia. Le había dado justo donde más le dolía. Sabía que Maximilien estaba a punto de casarse nuevamente, pero escuchar a alguien recordárselo era como arrancar la costra de una herida que nunca terminaba de sanar. Ya habían pasado dos años desde el divorcio, y aun así, su recuerdo seguía atormentándola.
—No estamos hablando de mí. Eso ya es parte del pasado —dijo Helena, con la voz temblando de ira contenida—. Pero escúchame bien, Billy. Mantente lejos de mi hermana. Me conoces y sabes que siempre cumplo mis advertencias. Si no voy ahora mismo a denunciarte, no es por ti, sino por tu familia. Así que piénsalo bien. Estás advertido. Y tú, Ana, súbete al auto de inmediato.
—No voy a ninguna parte contigo. Odio que siempre intentes controlarme. No tienes idea de cuánto te detesto —espetó Ana, forcejeando para liberarse del agarre firme de su hermana.
Billy, sin inmutarse, se dio la vuelta y se marchó, como si nada de lo sucedido tuviera importancia. Ana gritó su nombre, rogándole que no la dejara sola, pero él ni siquiera se dignó a mirar atrás.
—¿Te das cuenta ahora de lo mucho que le importas? —dijo Helena, con una mezcla de lástima y frustración—. Abre los ojos, Ana. Ese desgraciado solo te quiere para pasar el rato.
Después de escuchar las palabras de Helena, Ana finalmente cedió y subió al auto. Durante todo el trayecto no hizo más que llorar en silencio, con la mirada fija en la ventana, como si el paisaje borroso pudiera consolarla.
Al llegar a casa de su madre, Helena vio a la mujer de pie en la entrada, pero fue el llanto desconsolado de Ana lo que acaparó su atención. Sin pensarlo dos veces, la abrazó con fuerza y la llevó directo al dormitorio, intentando, sin éxito, calmar su angustia.
Una vez sola en el salón, Helena recorrió con la mirada cada rincón de la casa. Los lujos y los adornos ostentosos parecían fuera de lugar, un recordatorio doloroso de la falta de sensatez. Pensó que, tras la muerte de su padre, manejarían con más prudencia el poco dinero que él, con tanto esfuerzo, les había dejado.
Pero la realidad era otra. Tanto su madre como Ana estaban dilapidando el capital como si fuera inagotable. Desde su divorcio, Helena apenas las visitaba, pero cada mes enviaba puntualmente una pequeña suma de dinero, creyendo que, al menos, eso las mantendría a flote.
—¿Qué haces aquí? —la voz de su madre irrumpió en la sala, cargada de enojo.
Helena cerró los ojos por un instante y respiró hondo. Estaba cansada de callar, de fingir que todo estaba bien. Por primera vez en su vida, decidió encarar a su madre sin reservas.
—Siempre supiste lo que estaba pasando y no me dijiste nada, mamá. ¿Cómo pudiste permitir que algo así sucediera? —le espetó, con la mirada clavada en la de ella, sin rastro de temor.
—No sé para qué viniste —espetó su madre con el rostro desencajado—. Lo único que haces siempre es arruinarlo todo con tus estúpidos principios. Esta era nuestra única oportunidad de recuperar la vida a la que estamos acostumbradas. El pusilánime de tu padre nos dejó en la miseria, y tú… tú ni siquiera fuiste capaz de retener a Maximilien. Y ahora que Anita había logrado atrapar a Billy, vienes y lo echas todo a perder. Entiéndelo de una vez, Helena: no te necesitamos aquí. Lo único útil que podrías hacer sería reconquistar a tu exmarido, hijita.
Las palabras de su madre eran como puñales, afilados por el resentimiento y la codicia. Helena la observó por un largo instante, con una mezcla de dolor y determinación reflejada en su mirada.
—Es increíble hasta dónde eres capaz de llegar por conseguir lo que quieres —dijo, con la voz firme pero cargada de tristeza—. Pero a Ana no le vas a arruinar la vida como lo hiciste conmigo. Te lo aseguro.
Sin esperar respuesta, Helena dio media vuelta y salió de aquella casa que, lejos de ser un refugio, siempre había sido un campo de batalla emocional. El peso en su pecho era insoportable, pero no tanto como la certeza de que, para su madre y su hermana, ella nunca había sido más que un obstáculo.
Mientras caminaba por la acera desierta, no pudo evitar que las lágrimas nublaran su visión. Sabía que estaba sola. Lo había estado desde que su padre murió y todo en su vida se desmoronó. Hasta que apareció Maximilien. Él fue su única luz en medio de la tormenta, el hombre del que se enamoró sin remedio y con quien, por un breve tiempo, construyó un hogar.
A pesar de sus constantes ausencias, cuando estaban juntos, el mundo parecía detenerse. Los momentos compartidos compensaban las distancias y las horas de soledad. Pero ahora, ese amor también era solo un recuerdo doloroso, una promesa rota que se negaba a desaparecer.
Cuando el divorcio se volvió inevitable por aquel malentendido devastador, Helena sintió que su mundo se desmoronaba. Le tomó mucho tiempo reconstruirse, recoger los pedazos de su corazón y encontrar algo parecido a la paz. Pero ahora, la sola idea de buscar a Maximilien la paralizaba. Temía que esos sentimientos, enterrados a la fuerza, despertaran con más ímpetu del que podría soportar. Porque, aunque lo negara, el amor por él seguía latiendo, silencioso pero persistente.
Sin embargo, no podía permitirse flaquear. El asunto con su hermana era demasiado grave para ignorarlo. Helena conocía bien a Billy y sabía que no se detendría. Seguiría manipulando a Ana, explotando su ingenuidad y su fragilidad emocional hasta dejarla completamente rota.
Desde que su padre murió, Ana había lidiado con crisis recurrentes, arrastrando problemas emocionales que nunca logró superar del todo. Billy estaba al tanto de cada una de sus debilidades y, aun así, no tuvo reparos en aprovecharse de ellas, sin importar el daño que pudiera causar.
Con el alma hecha un nudo, Helena comprendió que no tenía opción. Reunió cada gramo de fortaleza que le quedaba y tomó la decisión que, lo sabía, cambiaría el rumbo de su vida: debía llamar a Maximilien. No por las hirientes palabras de su madre, sino por el bien de su hermana.
Cuando finalmente llegó a su apartamento, se dejó caer en el sofá como si el peso del día la hubiera aplastado por completo. Lloró en silencio, hasta que no quedaron lágrimas, hasta que la frustración se disipó lo suficiente como para pensar con claridad.
Respiró hondo, se aclaró la garganta y, con la mano temblando apenas, marcó el número de la empresa de Maximilien. El timbre del teléfono resonó en el silencio de la sala, cada tono más largo y pesado que el anterior. Helena cerró los ojos y se preparó para enfrentar no solo el problema de su hermana, sino también los fantasmas que creía haber dejado atrás.
—Buenos días, ¿podría comunicarme con el señor Maximilien Baker, por favor? —pidió Helena, intentando que su voz no revelara el torbellino de emociones que la consumía.
—¿De parte de quién? —respondió la secretaria con amabilidad profesional.
—Dígale que la señorita Helena Andrews necesita hablar con él —contestó, aferrando el celular como si aquel objeto pudiera sostenerla en pie.
Su corazón latía con tanta fuerza que parecía resonar en sus oídos. Las manos le temblaban, traicionando el esfuerzo por mantenerse serena. Pero nada la preparó para lo que vino después: la voz de Maximilien. Esa tonalidad grave y seductora, intacta a pesar del tiempo, que siempre había tenido el poder de desarmarla.
El pasado se precipitó sobre ella con una intensidad abrumadora, como si los años de distancia se desvanecieran en un suspiro.
—Hola, Helena —saludó él, con la naturalidad de quien jamás dejó de conocerla—. Me dijeron que querías hablar conmigo. Pues bien, aquí estoy. Te escucho.
—Hola, Maximilien —respondió finalmente Helena, esforzándose por mantener la compostura—. Necesitamos hablar sobre algo importante.
—No veo qué asunto podrías tener conmigo —replicó él con frialdad—. Ni siquiera te dignaste a verme cuando firmamos el divorcio. No entiendo qué podría ser tan urgente ahora.
—No se trata de nosotros —aclaró ella, respirando hondo—. Es sobre Ana y Billy.
Hubo un breve silencio antes de que él preguntara, con evidente desconcierto:
—¿Ana y Billy? ¿Qué tienen que ver ellos en esto?
—Están saliendo, Maximilien. Y tenemos que hacer algo para detener esa locura.
El tono de Maximilien cambió de inmediato, de indiferente a serio.
—Entiendo. Esto no es algo que podamos discutir por teléfono. Nos vemos en el café de siempre, ¿sabes cuál te digo?
No esperó respuesta. Simplemente colgó, dejando a Helena paralizada, con el celular aún en la mano y un nudo de incertidumbre apretándole el pecho.
Latest Chapters
#96 Capítulo 96.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#95 Capítulo 95.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#94 Capítulo 94.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#93 Capítulo 93.
Last Updated: 04/17/2025 16:30#92 Capítulo 92.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#91 Capítulo 91.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#90 Capítulo 90.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#89 Capítulo 89.
Last Updated: 04/17/2025 16:31#88 Capítulo 88
Last Updated: 04/17/2025 16:31#87 Capítulo 87.
Last Updated: 04/17/2025 16:31
Comments
You Might Like 😍
From Substitute To Queen
Heartbroken, Sable discovered Darrell having sex with his ex in their bed, while secretly transferring hundreds of thousands to support that woman.
Even worse was overhearing Darrell laugh to his friends: "She's useful—obedient, doesn't cause trouble, handles housework, and I can fuck her whenever I need relief. She's basically a live-in maid with benefits." He made crude thrusting gestures, sending his friends into laughter.
In despair, Sable left, reclaimed her true identity, and married her childhood neighbor—Lycan King Caelan, nine years her senior and her fated mate. Now Darrell desperately tries to win her back. How will her revenge unfold?
From substitute to queen—her revenge has just begun!
Fake Dating My Ex's Favourite Hockey Player
Zane and I were together for ten years. When he had no one, I stayed by his side, supporting his hockey career while believing at the end of all our struggles, I'll be his wife and the only one at his side.But after six years of dating, and four years of being his fiancée, not only did he leave me, but seven months later I receive an invitation... to his wedding!If that isn't bad enough, the month long wedding cruise is for couples only and requires a plus one. If Zane thinks breaking my heart left me too miserable to move on, he thought wrong!Not only did it make me stronger.. it made me strong enough to move on with his favourite bad boy hockey player, Liam Calloway.
To protect what’s mine
Fangs, Fate & Other Bad Decisions
After finding out her boyfriend cheated, the last thing she expected was to stumble across a wounded man in an alley. And definitely not one with fangs. But thanks to a mix of cocktails, shame, and her questionable life choices, she takes him home. Turns out, he’s not just any vampire—he’s a king. And according to him, she’s his fated mate.
Now, she’s stuck with an overprotective, brooding bloodsucker who keeps rescuing her, a growing list of enemies who want her dead, and an undeniable attraction that’s making it very hard to remember why falling for a vampire is a terrible idea.
Because if she’s not careful, she won’t just lose her heart—she’ll lose her humanity.
My Marked Luna
"Yes,"
He exhales, raises his hand, and brings it down to slap my naked as again... harder than before. I gasp at the impact. It hurts, but it is so hot, and sexy.
"Will you do it again?"
"No,"
"No, what?"
"No, Sir,"
"Best girl," he brings his lips to kiss my behind while he caresses it softly.
"Now, I'm going to fck you," He sits me on his lap in a straddling position. We lock gazes. His long fingers find their way to my entrance and insert them.
"You're soaking for me, baby," he is pleased. He moves his fingers in and out, making me moan in pleasure.
"Hmm," But suddenly, they are gone. I cry as he leaves my body aching for him. He switches our position within a second, so I'm under him. My breath is shallow, and my senses are incoherent as I anticipate his hardness in me. The feeling is fantastic.
"Please," I beg. I want him. I need it so badly.
"So, how would you like to come, baby?" he whispers.
Oh, goddess!
Apphia's life is harsh, from being mistreated by her pack members to her mate rejecting her brutally. She is on her own. Battered on a harsh night, she meets her second chance mate, the powerful, dangerous Lycan Alpha, and boy, is she in for the ride of her life. However, everything gets complicated as she discovers she is no ordinary wolf. Tormented by the threat to her life, Apphia has no choice but to face her fears. Will Apphia be able to defeat the iniquity after her life and finally be happy with her mate? Follow for more.
Warning: Mature Content
Off Limits, Brother's Best Friend
“You are going to take every inch of me.” He whispered as he thrusted up.
“Fuck, you feel so fucking good. Is this what you wanted, my dick inside you?” He asked, knowing I have benticing him since the beginning.
“Y..yes,” I breathed.
Brianna Fletcher had been running from dangerous men all her life but when she got an opportunity to stay with his elder brother after graduation, there she met the most dangerous of them all. Her brother's best friend, a mafia Don. He radiated danger but she couldn't stay away.
He knows his best friend's little sister is off limits and yet, he couldn't stop thinking of her.
Will they be able to break all rules and find closure in each other's arms?
The Prison Project
Can love tame the untouchable? Or will it only fuel the fire and cause chaos amongst the inmates?
Fresh out of high school and suffocating in her dead-end hometown, Margot longs for her escape. Her reckless best friend, Cara, thinks she's found the perfect way out for them both - The Prisoner Project - a controversial program offering a life-changing sum of money in exchange for time spent with maximum-security inmates.
Without hesitation, Cara rushes to sign them up.
Their reward? A one-way ticket into the depths of a prison ruled by gang leaders, mob bosses, and men the guards wouldn't even dare to cross...
At the centre of it all, meets Coban Santorelli - a man colder than ice, darker than midnight, and as deadly as the fire that fuels his inner rage. He knows that the project may very well be his only ticket to freedom - his only ticket to revenge on the one who managed to lock him up and so he must prove that he can learn to love…
Will Margot be the lucky one chosen to help reform him?
Will Coban be capable of bringing something to the table other than just sex?
What starts off as denial may very well grow in to obsession which could then fester in to becoming true love…
A temperamental romance novel.
Goddess Of The Underworld.
When the veil between the Divine, the Living, and the Dead begins to crack, Envy is thrust beneath with a job she can’t drop: keep the worlds from bleeding together, shepherd the lost, and make ordinary into armor, breakfasts, bedtime, battle plans. Peace lasts exactly one lullaby. This is the story of a border pup who became a goddess by choosing her family; of four imperfect alphas learning how to stay; of cake, iron, and daylight negotiations. Steamy, fierce, and full of heart, Goddess of the Underworld is a why-choose, found-family paranormal romance where love writes the rules and keeps three realms from falling apart.
The Shadow Of A Luna
Everyone looked in that direction and there was a man standing there that I had never noticed before. He would have been in his early 20's, brown hair to his shoulders, a brown goatee, 6-foot 6 at least and very defined muscles that were now tense as his intense gaze was staring directly at me and Mason.
But I didn't know who he was. I was frozen in the spot and this man was just staring at us with pure hatred in his eyes. But then I realized that the hatred was for Mason. Not me.
"Mine." He demanded.
The Matchmaker
No one escapes the Matchmaker unscathed. The process is simple—each participant is paired with a supernatural being, often sealing their fate with blood. Death is the most common outcome, and Saphira expects nothing less. But when the impossible happens, she is matched with a creature so legendary, so powerful, that even the bravest tremble at its name—a royal dragon.
Now bound to an ancient force of destruction, Saphira finds herself among the royal pack. With them, she navigates a world of power, deception, and destiny. As she walks this new path, familiar faces resurface, bringing long-buried secrets to light. Her heritage—once a mystery—begins to unravel, revealing a truth that may change everything.
Alpha's White Lie
When a new guy moves into the empty apartment across the hall, Rosalie Peters finds herself lured towards the hunky man. Blake Cooper is a very hot, successful, and wealthy businessman with a life built on a little white lie.
Rosy’s life, on the other hand, is full of mystery. She’s hiding a secret that would tear apart love and friendship.
As the secrets in Rosy’s life start to unfold, she finds herself seeking refuge with Blake.
What Rosy didn’t anticipate was Blake’s admiration for her was so much more than just love; It was supernatural.
Life for Rosy changes when she discovers that Blake’s biggest secret was animalistic and so much bigger than hers!
Will Blake’s white lies make or break his relationship with Rosy?
How will Rosy adjust to all the secrets that throw her life into chaos?
And what will happen when Blake’s twin brother, Max, comes forward to claim his twin bond with Rosy’s?!
The Rejected Luna: From Outcast to Alpha Queen
Then she came back.
Layla—my pure-blooded half-sister with her perfect smile and poison tongue. Within days of her return from Europe, Paxton was ready to throw me away like yesterday's news.
"I want to sever our bond, Freya. Lyra is my true mate."
Wrong move, Alpha.
He thinks I'm just another submissive mate who'll quietly disappear. He's forgotten I'm a mixed-blood Alpha who's been playing nice for far too long. While he's busy playing house with my backstabbing sister, Lucas Morgan—the most dangerous Alpha in the territory—is making me an offer I can't refuse.
Paxton wants to discard me? Fine.
But he's about to learn that some women don't just walk away—they burn everything down on their way out.
I'm done being the good girl. Done being the perfect mate. Done hiding what I really am.
About Author

obraskeyrapayan
Download AnyStories App to discover more Fantasy Stories.
