El despertar del espíritu animal

CJ

Es la semana de mi cumpleaños número 18. Estoy súper emocionado, ya que mi animal espiritual despierta de su letargo. Es el comienzo de mi adultez. Además, la gran fiesta que mis padres están organizando para mí. No somos ricos, pero mi padre, BETA Ángel Skylar, BETA del Alfa, tiene algunos beneficios aquí en la Manada Stone Valley en Florida. Sí, somos lobos.

Hoy es 3 días antes de mi cumpleaños el sábado. Acabo de ser despertado por mi hermano mayor Alex, quien salta sobre mí mientras dice:

—¡Oye, hermano, vamos!

Gruño y me levanto de un salto.

—¡¿Por qué tienes que hacer eso?!

—Porque es divertido y te levantas tarde.

Se ríe mientras sale de mi habitación. Tiene 20 años. Entrena a los guerreros avanzados. Es impresionante pero molesto.

Me levanto y me preparo para la escuela. Me pongo mis jeans con una camiseta sin mangas y mi camiseta de fútbol americano encima. Decido no cepillarme el cabello rizado y me pongo mi gorra verde favorita, junto con mis zapatillas verdes. Agarro mi bolsa de deporte y me dirijo a la cocina donde ya está toda mi familia.

Entrar en la cocina es el mejor olor del mundo. Mi mamá, BETA Sheera Skylar, BETA de la Luna, es la mejor cocinera. No hay nadie que haya probado su comida y no se haya enamorado de ella. Esta mañana hizo tostadas francesas, tocino y huevos revueltos. Me serví un plato y comencé a comer.

—Despacito, mijo. No va a desaparecer —me dice mi mamá. Sí, soy hispano por el lado de mi mamá. Ella viene de una manada llamada Bora Red Pack en Puerto Rico.

Después de terminar el desayuno, agarré mis cosas y me fui con Alex a la escuela. Él me lleva porque los terrenos de entrenamiento están a 2 minutos de la escuela. Llegué y me dirigí directamente a mi casillero donde estaban mis amigos, Jace, AJ y Mike. Hemos sido mejores amigos desde el nacimiento. Todas nuestras familias trabajan en la Casa de la Manada. Jace es el hijo de Gamma Rick Pawster, AJ es el hijo de Yazmin Longsteed, doncella de la Luna, y Mike es hijo de Turner y Mila Rockstead, Capitanes de Guerreros.

—¿Qué tal, hermano? —me saluda AJ.

—¿Qué pasa, chicos? ¿Están listos para el sábado? Porque yo no puedo esperar —digo entusiasmado.

Todos responden a la vez:

—¡Ya lo sabes!

Nos dirigimos a clase después de un rato de charla. Llega la hora del almuerzo y me encuentro con los chicos en nuestra mesa habitual. Llegué primero y me acomodé. Miré a un lado para ver si los chicos venían, cuando vi a esta hermosa pelirroja. Su cabello era tan naranja. Casi como fuego y tenía un par de ojos verdes. Mientras la admiraba, los chicos llegaron a la mesa y me sacaron de mi trance. Cuando volví a mirar, ella ya no estaba. Decidí seguir con mi día. Después de la escuela tuvimos práctica. Después de la práctica, nos subimos a la camioneta de Jace y nos dirigimos al centro comercial para comer algo y comprar nuevos atuendos para la fiesta. Después de que todos terminamos, nos dirigimos a mi casa. A los chicos les encanta venir porque les encanta la comida de mi mamá.

Cuando entramos a la casa, mi mamá ya había dejado la mesa lista para que comiéramos. Se convirtió en una rutina nuestra después de la práctica. La cena de esta noche es arroz, frijoles y pernil. Mi mamá siempre cocina nuestras comidas favoritas durante la semana de nuestros cumpleaños. Comimos hasta no poder más. Después de terminar, los chicos se fueron a casa y yo me fui a duchar.

Una vez solo en mi habitación, empecé a pensar en la chica pelirroja. No sé por qué empecé a pensar en ella. Puse una película y me fui a dormir. Al día siguiente me levanté a tiempo y decidí cepillarme el cabello y dejar que mis rizos colgaran. Decidí ponerme jeans negros, una camiseta gráfica verde y mis timberlands. Hoy Jace me recogió con los chicos y nos dirigimos a la escuela.

Noté mientras caminaba que la estaba buscando. No entiendo por qué me siento así. Sacudo la cabeza y continúo hablando con los chicos. Cuando llegó la hora del almuerzo, esperaba verla de nuevo. Cuando llegué a la mesa, Stacy estaba sentada allí. Stacy es una chica rubia y pequeña que ha estado tratando de salir con alguno de nosotros, pero ha fracasado miserablemente. Puse los ojos en blanco cuando dijo:

—Hola, CJ —mientras agitaba los dedos.

Le hice un gesto con la mano y me senté frente a Stacy. Ella parpadea coquetamente mientras intenta actuar linda. Yo solo como mi comida y la ignoro. Iba a dar otro bocado de mi pizza cuando la vi de nuevo. La chica pelirroja. Sigo llamándola chica pelirroja, pero no tengo idea de quién es. Nunca la había visto antes. En ese momento, los chicos llegaron y me sacaron de mis pensamientos.

De nuevo, cuando volví a mirar, ella ya no estaba. Nunca logro verla completamente ni su rostro. Todo lo que sé son sus ojos y su cabello. Cuando vuelvo a lo que está pasando frente a mí, Stacy sigue allí tratando de llamar la atención. Decidí terminar mi comida e ir a dar un paseo. Decidí caminar hacia el campo de fútbol cuando la vi acostada en el medio del campo. Me acerqué lentamente tratando de pensar en qué decirle.

A medida que me acercaba, ella se sentó y miró hacia mí. Me detuve y le hice un leve gesto con la mano. Ella levantó una ceja mientras fijaba sus ojos en los míos.